Javier Milei y Gustavo Sáenz: una relación que pone nerviosos a varios

El origen del vínculo puede ser sobre cargado de cientos de elucubraciones. Se puede hablar de Sergio Massa, o también de la pericia de Guillermo Francos.
Claro que debe existir una relación entre ambos mandatarios, pero un posteo de apoyo en “X” es, en la dinámica de comunicación del presidente argentino, un gesto positivo nada despreciable, es algún modo la orden a las tropas de que este gobernador es bien visto y no debe ser atacado.
El mandatario salteño tiene cierto conocimiento nacional desde antes de ponerse la banda de intendente, allá por el 2015, cuando caminaba la República Argentina con su nuevo amigo, Sergio Massa, en plena campaña presidencial.
A Javier Milei, y esto es de público conocimiento, siempre se lo relacionó al desastroso ex ministro de Economía de Argentina.
Denuncias de participaciones massistas en listas libertarias, o hasta incluso el bajo tenor de violencia que emplea Milei a la hora de referirse a Massa no hacen más que dejar abierta a la imaginación cualquier posibilidad. Desde Juntos por el Cambio, esto fue moneda de ataque corriente en el último año.
La holgada cintura política de Guillermo Francos también es una posible fuente de lubricación de relaciones.
Francos negoció con suma pericia los votos necesarios para destrabar la Ley de Bases en el Congreso, sin él y los votos opositores conseguidos a fuerza de largos diálogos, la primera gran victoria libertaria no habría sucedido nunca. Salta aportó sus porotos en esta puja, y como ya sabemos, todo suma.
Luego, y con un problema grave en la frontera norte del país, en donde gracias al kirchnerismo (y a esto hay que decirlo en tono muy claro y firme dado que fue el partido que más gobernó en los últimos 20 años), por acción u omisión, la frontera salteña boliviana se transformó en un vórtice del caos, la inacción, omisión y hasta fomento, de relaciones económicas de toda índole.
Todo esto favorecido por una vía de macro tráfico en camiones de combustible y micro tráfico en gomones a cargo de bagalleros.
Patricia Bullrich, que ya había sentido el rigor del problema cuando intentó darle fin durante la gestión Mauricio Macri, no dudo en ofrecer un nuevo plan de acción, sabiendo que a Milei le gusta ir a fondo y hacer anuncios que impliquen cierto peligro o tensión.
Y lo más importante, Gustavo Sáenz tomó una vieja discusión que los salteños teníamos y estaba relacionada a la atención médica (entre otras muchas cosas) que los ciudadanos bolivianos recibían en nuestro pais y, haciendo una lectura correcta de los vientos políticos, apostó por finalizar el servicio altruista y colocar aranceles.
No solo los salteños festejaron la medida (que quizás sea la medida de Gustavo Sáenz más aplaudida en lo que va de sus dos mandatos), sino que logró la atención de los medios de Buenos Aires, las principales capitales provinciales argentinas y claro está, las redes sociales en todo su conjunto.
Un golazo a lo Maximiliano Rodríguez ante México, un acierto de esos que provocan coletazos que se prolongan por mucho tiempo.
En esta línea, y habiendo encontrado un motivo que deje de lado las diferencias más allá de las negociaciones por los votos de los legisladores en ambas Cámaras, Sáenz encontró una interesante veta para mostrarse cerca de Javier Milei y ya no como un enemigo perteneciente a “La Casta”.
Ser felicitado por el tenedor del 56 por ciento de los votos nacionales, más el virulento equipo de shock que articula los puntos de discusión en las redes sociales es verdaderamente “un montón” a la hora de sobrevivir en estos campos de hastío en los reposa la coyuntura política actual en nuestro país.
En este contexto, hay que recalcar que el posteo de felicitación que recibe Gustavo Sáenz por parte de Javier Milei se da a escasas horas de que la super candidata natural de La Libertad Avanza en la provincia de Salta ensayara un furibundo video cargado de denuncias y acusaciones en potencial o “dando a que te hablo a vos” producto de los escraches en redes que le cayeron encima por movilizarse en helicóptero dentro de la provincia para realizar una visita de índole político electivo.
También, y a esto hay que decirlo, el titular del vehículo es un fuerte lobista relacionado a los servicios aéreos que tiene todos sus intereses puestos en el futuro de la provincia.
Así, y a meses de las elecciones provinciales, y un poquitito más allá, las nacionales, está claro que un partido tendrá boleta violeta libertaria, pero también queda más que visible la fuerte posibilidad de que la boleta del partido provincial se le parezca y bastante.
¿Se quiebra el monopolio mileista amarillo en Salta? ¿Será, para la bronca de más de uno de los jugadores un vamos y vamos? ¿Ordenarán a ciertos candidatos moderar el tenor de sus ataques? Todo parece indicar que ya está hecho.