Al parecer a Hucena le dieron las famosas pastillas de amnesia o la falta de Fósforo le está haciendo estragos en la memoria ya que no estaría recordando a su compañero de fórmula en las elecciones del 2023.

La diputada que tanto se golpea el pecho y se pone la camiseta de la causa, llevó como segundo candidato a diputado en sus listas a nada más y nada menos que Sergio Oliva, ex intendente de Aguas Blancas, a quien la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal resolvió condenarlo por haber dispuesto la apertura de un paso fronterizo ilegal con el Estado Plurinacional de Bolivia, para luego sucederlo en el cargo Carlos Alfredo "Conejo" Martínez, hoy detenido e imputado por vínculos con el narcotráfico.

Indudablemente el circo de Hucena es fulbito para la tribuna y al menos se logró hablar algo de ella que no sea las “fantasmeadas” que pega en el recinto los días martes en cada sesión. Y es que la diputada se va en puro palabrerío, pero en la práctica teje alianzas que la dejan en evidencia como el ya mencionado Oliva, que aparte de la condena judicial, la fama que dejó en Aguas Blancas, emula bastante a su predecesor “Conejo Malvado” Martínez, además de no haber participado jamás en ninguna reunión que convocó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich por temas de narcotráfico en esa zona.

Desde la misma Legislatura ya proliferan los chismes de pasillos y hasta los mismos compañeros de banca, comentan que la dama de pelo rizado, navega en una tormenta de confusiones tratando de poner “un huevo en cada canasta” para cubrirse por las dudas y estar bien con “Dios y con el diablo” o sino no se explica cómo pudo haber estado acompañada en la fórmula electoral de un tipo como Oliva quien está directamente relacionado al narcotráfico, al otro día repudiar esos hechos criminales.