A pesar de la poca pericia que demostró en sus más de dos años y medio como concejal salteño; desde el Grand Bourg estarían dispuestos a resignar la importantísima banca en la casa de los leones, para que fuera ocupada por alguien que no suele tener el perfil de un representante del pueblo, sino que llega porque obedece a sus jefes sin siquiera animarse a cuestionarlos.

Guillermo Kripper, el "Guillo" como lo conocemos popularmente, empezó haciendo periodismo deportivo, pasó por el ya desaparecido Canal 11 de Salta y ahora es un político digamos que afianzado. Entre sus logros más destacados se encuentran el no haber sufrido quemaduras de cierta peligrosidad luego de que, al aire, tomara agua muy caliente de un termo matero, pensando que se trataba de una bebida fresca.

Legislativamente no se tiene conocimiento de proyecto de relevancia que haya presentado en todo su primer mandato, y mucho menos en estos meses que lleva del segundo. Sus bailes matinales junto a "Vitín" Lamberto, el aparecer de vez en cuando por alguna feria barrial o actividad donde se encuentren los funcionarios municipales, parecen ser los requisitos que le pidieron al conductor de TV que cumpla para poder asegurarse el currito un par de años más.

En el primer anillo de contención del oficialismo ya "saltó la bronca" porque muchos se autoperciben como mejores candidatos para reemplazar a Gustavo Carrizo en la banca provincial. Aunque, convengamos, no es tan difícil reemplazar a alguien a quien no le interesa el puesto que le otorgó el pueblo legítimamente años atrás y ni siquiera cae de vez en cuando a la Legislatura.

Por ahí quisieron entongar a Vitín, amigo de Guillo, en una cuestión de egos y celos, pero el binomio tiene bien en claro que su paso por la función es transitorio y si les ordenan que asuman vestidos de novia como hizo Griselda Galleguillos meses atrás en un próximo cargo, no solamente lo hacen, sino que hasta el ramo le tiran a los oficialistas que siguen esperando una "bendición primate" para poder poner un quiosquito, aunque sea chiquito por ahí.