El 2025 está más cerca de lo que muchos creen. A pesar de recién estar por ingresar al octavo mes del año, las miras están puestas para dentro de 14 meses, aproximadamente, cuando se pongan en juego seis bancas representativas de los salteños en el Congreso de la Nación.
Experimentados contra jóvenes, nuevos contra viejos. La lucha parece dar inicio, sobre todo en el frente oficialista que deberá dirimir sus candidaturas mucho más allá de las urnas.
Con guantes incluidos, la que empezó a marcar territorio fue Emilia Orozco. La joven legisladora, ex concejal, es una de las caras más renovadas de un no tan ancestral partido encabezado por Alfredo Olmedo, pero que tiene figuras que promedian el +50 de edad.
Carlos Zapata, el propio aceitunero o el economista Julio Moreno Ovalle, son muestras de que el hoy frente libertario salteño tiene más Ensure que colágeno en sus filas.
Tal vez por eso es que suena un tanto ilógico que María Emilia hoy pida pista para los más novatos si en su team están los que ya peinan canas. Pero eso fue lo que hizo. Claro que puertas afuera y quien fue receptor directo del petitorio fue el senador Juan Carlos Romero, uno de los que pone en juego su banca el próximo año.
Resulta que, aunque no tiene un partido en Salta, el ex gobernador es por ahora "Él" nombre de Javier Milei en Salta. Aunque la campaña la está orquestando el olmedismo, existen grandísimas oportunidades de que la última decisión pase por sus manos, lo que tiene intranquilos al sector amarillo.
Es que Orozco tiene razón. Romero es PRO, no libertario. Pero la influencia del ex mandatario, más la participación del PRO dentro de La Libertad Avanza podría ser el trampolín para que el Júcaro vuelva a encabezar una lista afín al gobierno nacional, como lo hiciera en su última participación en 2019, cuando todavía reinaba Macri en el país.
Emilia le pidió, entrevista mediante, que diera un paso al costado y abra el paso para la cuestionada "renovación". La diputada sabe del peso de Romero, y que hoy es un aliado aunque les pese un poco.
Pero es entendible, quiere llevar agua para su molino y hoy, como la cara fuerte de los libertarios, busca tener mayor protagonismo, aunque no se confirmó aún, y habrá que esperar varios meses para ello, no confirmó si le gustaría ocupar la banca de Juan Carlos.
Vale recordar que, en el caso del Senado, la fuerza que logro la mayoría de votos se queda con dos de las tres bancas en juego, mientras la restante queda en manos de la primera minoría.
Obvio es temprano para decir que alguno de ellos dos se hará con la banca, pero tienen que tener en cuenta a los candidatos de la provincia que tendrán el aval, seguramente, del gobernador y que no se descarta que aparezca una "maravilla ya no tan joven" entre los dispuestos a pelear por la mayoría.